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La catedral de Pisa y su torre inclinada

por | Descubrir Florencia, Toscana

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Un viaje a la grandeza medieval en la Catedral de Pisa

La Catedral de Pisa, también conocida como la Catedral Metropolitana Primaziale de Santa María Asunta, es un emblemático ejemplo del arte románico en Italia.

Ubicada en la famosa Piazza dei Miracoli, su historia se entrelaza con la rica herencia cultural de la ciudad. Construida en el siglo XI, la catedral refleja las múltiples influencias arquitectónicas de la época.

Su impresionante diseño y ornamentación la convierten en un destino imprescindible para quienes visitan Pisa. Además, su cercanía a otros monumentos importantes añade un valor adicional a la experiencia.

Historia de la Catedral de Pisa

La historia de la Catedral de Pisa es rica en acontecimientos que reflejan el poder y la influencia de la república marítima de Pisa. Desde su fundación en el siglo XI, este monumental edificio ha sido testigo de importantes eventos históricos y culturales.

Fundación y Primeros Años

La fundación de la catedral se remonta al año 1063, tras la victoria de las fuerzas pisanas en la batalla de Palermo. Este triunfo marcó un hito no solo en la historia militar de Pisa, sino también en su desarrollo religioso. La catedral fue concebida como un símbolo del poder y la riqueza acumulados por la república en su época dorada.

Bajo la dirección del arquitecto Buscheto, se iniciaron las obras con un estilo románico que integraba elementos de diferentes tradiciones arquitectónicas. La decisión de utilizar este enfoque ecléctico responde a la influencia de los comerciantes pisanos, quienes habían establecido vínculos comerciales con diversas culturas de la cuenca mediterránea.

Impacto de la Victoria en Palermo

La victoria sobre los musulmanes en Palermo fue un momento crucial que impulsó la gloria de Pisa. Este éxito militar no solo consolidó la posición de la república en el Mediterráneo, sino que también propició un florecimiento cultural y arquitectónico. La catedral se edifica en este contexto de creciente autoconfianza y ambición. La construcción se diseñó intencionadamente para deslumbrar, sirviendo como un testimonio del estatus de Pisa como una de las principales potencias marítimas de la época.

Consagración por el Papa Gelasio II

El 26 de octubre de 1118, la catedral fue consagrada por el Papa Gelasio II. Este evento no solo marcó la conclusión de la fase de construcción, sino que también reafirmó la autoridad religiosa de la catedral. Desde su consagración, se convirtió en un importante centro de culto y en la sede de la diócesis de Pisa, aumentando su relevancia en el ámbito eclesiástico de la región.

A lo largo de los siglos, la catedral ha experimentado numerosas transformaciones y ha sido objeto de diversas restauraciones, pero su esencia histórica y su importancia cultural permanecen inalteradas. La Catedral de Pisa no solo es un lugar de culto, sino también un emblema de la rica historia de la ciudad.

Arquitectura y Diseño de la Catedral

La Catedral de Pisa destaca por su rica y variada arquitectura, que incorpora múltiples influencias y estilos. Su diseño es un reflejo de la época medieval, donde convergen elementos románicos y detalles decorativos elaborados.

Estilo Románico y sus Influencias

La catedral representa una de las mejores expresiones del estilo románico en Italia. Este estilo se caracteriza por el uso de arcos semicirculares y materiales robustos, transmitiendo una sensación de solidez y seguridad. Sin embargo, su diseño no se limita a una sola tradición, sino que incluye diversas influencias.

Elementos Clásicos y Lombardo-Emilianos

Entre las características más notables se encuentran los elementos clásicos que se reflejan en las columnas y capiteles. Estos componentes están inspirados en la arquitectura de la antigua Roma, integrando la grandeza clásica en un entorno religioso. De la misma manera, el estilo lombardo-emiliano se evidencia en el uso de mármoles de colores y los elaborados detalles escultóricos que decoran la fachada.

Influencias Bizantinas e Islámicas

El impacto de la arquitectura islámica se observa principalmente en la cúpula elíptica. Esta forma no solo añade singularidad a la estructura, sino que también representa el intercambio cultural que tuvo lugar en el Mediterráneo durante la Edad Media. La influencia bizantina se manifiesta en la ornamentación y los mosaicos que adornan el interior, aportando un sentido de trascendencia y espiritualidad al edificio.

La Planta y la Estructura

La disposición interna de la catedral es otro aspecto fundamental que merece atención. Su planta fue pensada para maximizar la luz y ofrecer un recorrido armónico a los visitantes. A través de su diseño ingenioso, se logra una experiencia espacial única que invita a la contemplación.

Planta de Cruz Latina y Cruz Griega Original

Originalmente, la catedral fue concebida con una planta de cruz griega. Sin embargo, a medida que avanzó la construcción, se transformó en una cruz latina, un diseño más común en las iglesias de la época, que facilita la distribución de los espacios litúrgicos y acoge mejor a los fieles. Este cambio no solo se realizó por razones estéticas, sino también por su funcionalidad en el contexto religioso.

Nave Central y Naves Laterales

La estructura cuenta con una nave central imponente, rodeada de naves laterales que proporcionan una simetría visual y estructural. Este sistema de naves permite una experiencia espacial enriquecedora, donde los fieles pueden experimentar tanto la grandeza del espacio central como la intimidad de los laterales. Las columnas de granito monolíticas, con sus arcos de herradura, alternan entre naves, creando un diálogo visual fascinante y un sentido de continuidad en el diseño.

Elementos Artísticos y Ornamentales

La Catedral de Pisa se distingue por una rica colección de elementos artísticos y ornamentales que reflejan la grandeza de su diseño. Desde esculturas complejas hasta mosaicos impresionantes, cada detalle invita a los visitantes a apreciar la fusión de arte y arquitectura, haciendo que el interior sea un verdadero desfile de creatividad.

Púlpito de Giovanni Pisano

El púlpito de Giovanni Pisano, creado entre 1302 y 1310, es una de las piezas más destacadas de la catedral. Esta obra maestra es apreciada por su fino estilo gótico y por la profundidad de sus relieves. Su complejidad escultórica revela una narrativa visual rica en detalles, que narra historias de la vida de Cristo y otros personajes bíblicos.

Complejidad Escultórica del Púlpito

La decoración del púlpito incluye una serie de paneles escultóricos que exhiben un extraordinario nivel de habilidad técnica. Cada panel presenta escenas cuidadosamente elaboradas, con figuras que muestran una sorprendente expresividad. Las escenas de la Anunciación, la Natividad y la Crucifixión se entrelazan, creando una profunda conexión con los elementos espirituales que la catedral representa.

Mosaico en el Ábside

El ábside de la catedral se enriquece con un fascinante mosaico que data del período medieval. Esta obra es un testimonio de la habilidad artística de su tiempo y se centra en la representación de figuras sagradas.

Cristo Entroizado, Virgen y San Giovanni

En el centro del mosaico destaca la figura de Cristo entronizado, rodeado por la Virgen María y San Giovanni. El uso de oro y colores vibrantes establece un contraste espectacular que capta la atención de quien observa. Este diseño no solo cumple una función decorativa, sino que también sirve como un símbolo de la autoridad divina y la importancia religiosa de la catedral.

Mosaicos de Cimabue

Entre las valiosas piezas del ábside se encuentra un mosaico realizado por Cimabue, un destacado artista del siglo XIII. Esta obra, que retrata escenas religiosas, es conocida por su riqueza de detalles y el uso innovador de la perspectiva, algo poco común en su época. Cimabue logra transmitir una intensa espiritualidad a través de cada figura, dejando una huella imborrable en la historia del arte religioso.

Pinturas en la Tribuna

La tribuna que se alza detrás del altar mayor está adornada con una serie de pinturas que ilustran la maestría artística de la región. Estas obras no solo son testimonios visuales de la devoción religiosa, sino que también reflejan el dinamismo cultural de la Toscana durante los siglos XVI y XVII.

Obras de Andrea del Sarto y Sodoma

Entre los artistas que dejaron su impronta en la tribuna se encuentran Andrea del Sarto y Sodoma. Sus respectivas obras aportan un enfoque distintivo a la representación de personajes sagrados, destacando la atención al detalle en las vestimentas y una paleta de colores que otorgan vida a los lienzos. Los retratos de figuras bíblicas, como Santos y mártires, están dotados de una calidad casi vibrante, haciendo de la tribuna un lugar de contemplación y asombro.

Exterior de la Catedral

El exterior de la catedral se destaca por su impresionante fachada y sus elaborados detalles ornamentales. Elementos de mármol y mosaicos cautivan a los visitantes desde el primer vistazo, creando una obra de arte que refleja la riqueza cultural y artística de la época.

Fachada de Mármol y Mosaicos

La fachada de la catedral es una mezcla fascinante de colores y texturas, gracias al uso de diferentes tipos de mármol. Estas piedras preciosas fueron traídas de diversas regiones, lo que confiere a la estructura un aspecto único y vibrante. Su diseño está adornado con mosaicos que cuentan historias religiosas y celebran la grandeza de la ciudad.

Los mármoles blancos y negros se alternan para formar patrones intrigantes, evocando el estilo de las grandes mezquitas orientales. Este juego de colores no solo es una maravilla visual, sino que también simboliza la rica mezcla cultural de Pisa, que se reflejó en su arquitectura y en su historia.

Puertas de Bronce

Las puertas de bronce son otro de los elementos que realzan la majestuosidad del exterior de la catedral. Estas imponentes estructuras no solo sirven como accesos al interior, sino que también son obras de arte en sí mismas.

Puerta de San Raniero

La Puerta de San Raniero es la más antigua y destacada de la catedral. Fundida por Bonanno Pisano alrededor de 1180, esta puerta es un testimonio del talento de los artesanos de la época. Su diseño intrincado presenta relieves que ilustran escenas bíblicas, incluyendo la vida de San Raniero, el patrón de Pisa. A pesar de los estragos del tiempo, esta puerta ha sobrevivido a varios incidentes a lo largo de los siglos, lo que la convierte en un símbolo de resistencia y devoción.

Obras de Bonanno Pisano

Bonanno Pisano, reconocido en la génesis de las puertas, dejó un legado que trasciende en la Puerta de San Raniero. Además de esta pieza, su trabajo abarca diversas esculturas y adornos en la catedral. Estas obras, llenas de detalles minuciosos, revelan su maestría y la influencia que tuvo en la escultura de la época. Sus puertas forman parte de un conjunto que destaca entre otras numerosas piezas de bronce que adornan la fachada, cada una contando una parte de la rica historia de Pisa.

Transformaciones Históricas

La Catedral de Pisa ha experimentado una serie de transformaciones a lo largo de su historia. Estas remodelaciones y restauraciones reflejan su adaptación a los cambios sociales, culturales y artísticos que ocurrieron en la región.

Remodelaciones y Ampliaciones bajo Rainaldo

Durante la primera mitad del siglo XII, bajo la dirección del arquitecto Rainaldo, la catedral fue sometida a considerables reformas. Este proceso no solo abarcó la ampliación del espacio, sino que también fortaleció la estructura existente, garantizando su estabilidad y esplendor.

Nave y Transepto Extendidos

Con la intención de proporcionar una mayor capacidad a la catedral, se añadieron tres tramos a la nave. Esta mejora permitió un flujo más amplio de fieles y visitantes, reflejando el crecimiento de la influencia religiosa de Pisa. Al mismo tiempo, el transepto fue ampliado, resultando en un diseño más majestuoso y equilibrado. Las proporciones de la catedral se perfeccionaron, ayudando a marcar su presencia en la ciudad y el entorno local.

Restauraciones después del Incendio de 1595

El incendio que devastó la catedral en 1595 marcó un punto crítico en su historia. Este desastre dañó gravemente muchos elementos de su interior y exterior. En los años posteriores, varios esfuerzos de restauración se llevaron a cabo para devolverle su antiguo esplendor.

Revestimiento y Pinturas del Siglo XVIII

Durante el siglo XVIII, se inició un ambicioso programa de revestimiento de las paredes internas. Este proyecto incluyó la adición de grandes pinturas que decoraron el interior de la catedral. Artistas contemporáneos dieron vida a diversas narrativas visuales que aportaron un nuevo contexto a la estructura, enriqueciendo su valor artístico y cultural. Las modificaciones en la fachada también fueron necesarias, y algunos elementos originales fueron sustituidos por réplicas que se conservan en museos, asegurando así la conservación de la autenticidad del monumento.

Elementos Notables del Interior

El interior de la Catedral de Pisa es un amplio espacio que destaca por su riqueza decorativa y elementos arquitectónicos únicos. Cada rincón ofrece una experiencia visual que narra la historia y la magnificencia de la arquitectura románica a través de sus detalles meticulosamente elaborados.

Columnas de Granito y Arcos de Herradura

Las columnas monolíticas de granito que se alzan en el interior del templo son un verdadero testimonio del maestría artesanal de la época. Estas columnas no solo aportan estructura, sino que también generan un efecto visual impresionante al sostener los arcos de herradura que decoran tanto el interior como el exterior. Esta combinación de elementos proporciona una sensación de amplitud y grandeza al espacio.

Los arcos de herradura, en particular, son un elemento distintivo que refuerza las influencias islámicas y bizantinas en el diseño de la catedral. Estos arcos, con su forma característica, contribuyen a crear un ambiente acogedor, al mismo tiempo que se complementan con la robustez de las columnas. La combinación genera un juego de luces y sombras que realza la belleza del interior.

Alternancia de Mármol Blanco y Negro

Otro aspecto sobresaliente del interior es la alternancia de mármol blanco y negro en las paredes. Este diseño no solo añade un atractivo visual, sino que también refleja la herencia cultural y artística de Pisa. La utilización de estos colores en patrones contrastantes evoca imágenes de las grandes mezquitas de Oriente Medio, indicando el contacto entre diversas culturas a lo largo de los siglos.

La alternancia de mármol blanco y negro tiene un efecto casi hipnótico que invita a los visitantes a observar las intrincadas texturas y los matices que ofrecen. Este detalle resalta la atención al detalle y la aspiración de los arquitectos de la época por lograr una belleza duradera en la catedral.

Cúpula Elíptica y sus Inspiraciones

La cúpula elíptica que adorna la catedral es uno de los elementos más notables de su interior. Inspirada en la arquitectura islámica, la cúpula se eleva majestuosamente, dominando el espacio y ofreciendo una perspectiva única desde el suelo. Su forma elíptica y la manera en que se integra con el resto de la estructura son testimonio del ingenio arquitectónico del tiempo.

Este elemento aporta no solo un sentido de verticalidad al interior, sino que también es clave en la iluminación del espacio. A través de sus ventanas, la luz natural se filtra, creando un ambiente casi espiritual. Las complejidades de su diseño reflejan la riqueza de la influencia intercultural que caracteriza a la Catedral de Pisa.

El Conjunto Monumental

El Conjunto Monumental de Pisa es un ejemplo fascinante de la rica historia y la grandiosidad arquitectónica de la ciudad. Compuesto por varios edificios significativos, cada uno de ellos tiene su propio carácter y belleza. A continuación, se exploran los elementos más emblemáticos de este conjunto.

Torre Inclinada de Pisa

La famosa Torre Inclinada de Pisa es uno de los símbolos más reconocibles de Italia y un punto de referencia imperdible. Construida como campanario de la catedral, su inclinación es el resultado de un suelo inestable. Esta torre, que se inició en 1173, ha tenido una historia llena de desafíos, incluyendo varias fases de construcción y restauración.

  • La torre cuenta con una altura de aproximadamente 56 metros.
  • Posee ocho plantas, de las cuales la última alberga las campanas.
  • La inclinación alcanza los 4 grados, lo cual crea una visual perturbadora y extraordinaria al mismo tiempo.
  • Los visitantes pueden subir sus 294 escalones para disfrutar de vistas impresionantes de Pisa y sus alrededores.

Baptisterio de Pisa

El Baptisterio de Pisa es el edificio más grande de su tipo en Italia y destaca por su espléndida arquitectura y acústica. Situado junto a la catedral, fue iniciado en 1152 y es un sitio donde se celebran ceremonias importantes. Su diseño combina elementos románicos y góticos, simbolizando el nexo entre el antiguo y el nuevo estilo arquitectónico.

  • El Baptisterio presenta una magnífica cúpula de madera que acentúa su acústica.
  • El interior cuenta con un impresionante púlpito, obra maestra del escultor Nicola Pisano.
  • Las paredes exteriores están decoradas con elegantes esculturas y mármoles de diversos colores.

Camposanto y Museos de la Ópera y la Sinopía

El Camposanto, también conocido como el Cementerio Monumental, es un espacio lleno de historia y arte. Este recinto se utilizó para enterrar a los ciudadanos de Pisa desde el siglo XIII y contiene frescos y esculturas antiguas que reflejan la devoción y la cultura de la época. Anexos al Camposanto se encuentran los Museos de la Ópera y la Sinopía, donde se conserva una colección invaluable de obras de arte.

  • El Camposanto está adornado con murales y frescos que datan de distintos períodos artísticos.
  • Los Museos contienen obras como la famosa «Sinopía» que muestra la técnica de dibujo al fresco que predecía la pintura.
  • Estos museos son el hogar de obras de arte de renombre, que reflejan la historia cultural de Pisa y sus influencias.

La Catedral de Pisa no solo es un monumento arquitectónico, sino que también representa un importante símbolo cultural y religioso. Su estatus de patrimonio histórico se refuerza a través de diversas designaciones y reconocimientos internacionales.

Patrimonio y Significado Cultural

Declaración como Patrimonio de la Humanidad

En 1987, la Catedral de Pisa fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, reconocimiento que destaca su valor universal. Esta designación se basa en su excepcional belleza y perfil arquitectónico, así como en su singular integración en el contexto de la Piazza dei Miracoli, que también incluye la famosa Torre Inclinada y el Baptisterio.

La decisión de la UNESCO de incluir este conjunto monumental en su lista se fundamenta en su función como punto de referencia para la historia y la cultura europeas. La catedral representa una fusión de influencias que, a lo largo del tiempo, han contribuido a su desarrollo arquitectónico y a su relevancia como símbolo de la identidad pisana.

Importancia Religiosa y Cultural en Pisa

Desde su consagración en 1118, la catedral ha sido un espacio central para la vida religiosa de Pisa. Ha acogido ceremonias, festividades religiosas y eventos importantes a lo largo de los siglos. Esta función perpetuada en el tiempo subraya su papel como lugar de reunión y devoción para la comunidad local.

La relevancia cultural de la Catedral de Pisa radica también en su capacidad de atraer a visitantes de todo el mundo. Turistas, académicos y devotos acuden a admirar su arte y arquitectura, experimentando así la historia viva de la ciudad. Este flujo de visitantes también ha impulsado la economía local, creando un efecto positivo en el bienestar de la comunidad.

  • Eventos religiosos anuales que conectan a los fieles con sus tradiciones.
  • Conciertos y actividades culturales que enriquecen la oferta artística de la ciudad.
  • Programas educativos que promueven la historia de Pisa y su patrimonio.

El Legado Perdurable de la Catedral

La Catedral de Pisa ha perdurado a lo largo de los siglos, resistiendo desafíos como incendios y modificaciones arquitectónicas. Su legado no solo se manifiesta en su estructura, sino también en las historias y recuerdos que los visitantes llevan consigo. La catedral ha sido un testigo mudo de la evolución de la ciudad y su papel en la historia del Mediterráneo.

Este legado se encuentra presente en la memoria colectiva de la población y en la narrativa cultural de Italia. Su imagen icónica, con la Torre Inclinada a su lado, forma parte de la identidad visual de Pisa y se reconoce globalmente. La preservación del templo es crucial para las futuras generaciones, asegurando que la historia y la cultura de Pisa se transmitan de manera efectiva en el tiempo.

La Torre de Pisa, uno de los símbolos más emblemáticos de Italia con permiso del Coliseo, esta ubicada en la Piazza del Duomo, conocida como «plaza de los milagros» por la presencia de sus cuatro edificios religiosos.

Visitar la Torre de Pisa

La podemos encontrar, como su propio nombre indica, en la ciudad de Pisa, un municipio de la Toscana que se encuentra a 85 kilómetros al oeste de Florencia.

La torre se empezó a levantar en agosto de 1173 pero, tras construir el primer piso, se detuvo el proyecto al comprobar la inestabilidad del terreno pantanoso en el que se asienta y no disponer de las técnicas suficientes para llevarla a cabo con seguridad, hasta que pasaron 100 años y la tierra se estabilizó dejando el edificio ligeramente inclinado.

Pasado ese tiempo se procedió a construir cuatro pisos más hasta que pararon de nuevo durante pocos años y por fin terminó de construirse en 1280.

La Torre de Pisa es realmente impresionante, tiene una altura de 55,8 metros y pesa 14.700 toneladas. Cuenta con ocho pisos, cada uno de ellos rodeado por arcos y un enorme campanario en la cima.

Es imprescindible acercarse a esta torre si visitamos Florencia o la Toscana y, por supuesto, hacernos la famosa foto como si la estuviéramos aguantando.

Horario de la Torre de Pisa

Tenemos que ser previsores porque es un monumento que lo visitan miles de personas y siempre hay largas colas, es recomendable reservar la entrada a la torre de Pisa por internet. También tenemos que fijarnos en sus horarios que varían según el mes.

  • De junio hasta agosto la apertura es de 8:30h hasta las 22:00h
  • En abril, mayo y septiembre la apertura es desde las 9:00h hasta las 20:00h
  • En marzo la apertura es desde las 9:00h hasta las 18:00h
  • En octubre la apertura es desde las 9:00h hasta las 19:00h
  • En noviembre y febrero la apertura será desde las 9:40h hasta las 17:40h
  • En diciembre y en enero la apertura es desde las 10:00h hasta las 17:00h

La Torre de Pisa está abierta todos los días. Los niños menores de 8 años tienen prohibida la entrada por motivos de seguridad y hasta los 18 años tienen que ir acompañados de un adulto.

El recorrido de la visita se realiza en grupo y tiene una duración de poco más de 30 minutos, en la cual ascenderemos por una escalinata de 300 peldaños.

Al entrar encontraremos una enorme estancia con una escalinata haciendo espiral por los distintos pisos a un lado, si miramos hacia arriba veremos el gran techo abovedado. Podemos subir hasta la cima del campanario y contemplar las hermosas vistas, no apto si tienes vértigo.

Sin duda un lugar majestuoso que bien vale una visita desde Florencia a Pisa para admirar la belleza que impregna esta pequeña ciudad.